lunes, 30 de enero de 2012

Los lunes al sol

Eso me gustaría a mi hoy!
No haber venido a trabajar. Me ha costado levantarme un potosí. El caso es que si me quedo en casa no hago nada más que zampar y ver pelis. Ayer pasé un día guay. Mi padre me sorprendió diciendo que no fuera a ayudarles, porque iba a ver porquita gente (la verdad es que yo insistí poco eh?), y estuve en casa perreando de lo lindo. Cuando me entró hambre tuve un antojo y me hice unas patatas a la marinera que estaban que te mueres (ñam), y cuando me dio más hambre por la tarde merendé un par de sandwich de paté con queso, jajaja, joder, lo que me cabe en el estómago. ¿Por qué yo nunca me pongo mala o me empacho? Conozco un montón de gente que come y luego juran que nunca más porque casi se mueren. Ya podía pasarme a mí algo de eso. En fin, que luego tuve más hambre eh? Me apetecía dulce, pero como en casa no hay para no sucumbir a la tentación me comí media bolsa de riskettos y una de 3-D. Bueno, pues a las diez me zampé un chuletón de buey que no veas cómo estaba. Ay...., esto más que gula es lujuria.
Por supuesto hoy vuelvo al régimen, los lunes siempre vuelvo al régimen. Pero ya he decidido que esta semana invito a mi niña a cenar al chino, que no sé a cuál de las dos nos gusta más.
El caso es que yo no he disfrutado de la comida hasta ahora ¿sabéis? siempre andaba con mil y una gilipolleces, y aunque todavía me cuesta comer en público, poco a poco lo voy superando. Y es que no hay nada como una caña bien fresquita y unas bravas ¿verdad? No sé por qué me da que esta semana el régimen...
Los cabrones del seguro no han pagado todavía, pero estoy pensando que casi mejor porque así seguro que dura un poco más.
Bueno maj@s, ya hablamos!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario